
Nuevamente la afición porteña se llevó la victoria.
En menos de 30 minutos, el Teodoro Mariscal estalló en euforia y también se sofocó en un silencio fúnebre. Los seguidores porteños festejaron extasiados el empate parcial de Venados en la novena entrada, para que después el sonido de los maderos de Yaquis terminara por opacar el alarido de los cientos que, cabizbajos, dejaron el inmueble.
El ‘sí se puede’ hizo acto de presencia en una afición que aguantó el frío y por 10 entradas desgarró sus gargantas apoyando a Venados, pero que al final tuvo que aguantar el sabor amargo de la derrota.
La fiesta la puso el Chango 0te que fue parte del encuentro de semifinales entre Yaquis y Venados

Encuentro donde las personalidades no faltaron el Vocalista de la banda Adictivisa se echó un palomaso

Con la carrera de Paul León el Teodoro Mariscal se enciende en júbilo

Los Venados no podían creer como el juego se les había salido de la bolsa, luciendo cabizbajos durante la parte final del partido

El Debate, Mazatlán sinaloa – Lino Cárdenas.